La Piazza Navona es la plaza más famosa de Roma. Sobre todo, gracias a sus fuentes. Por lo que es, una de las más importantes y bonitas de la ciudad. Una parada obligatoria en tu viaje a Roma que te enamorará. ¡Sigue leyendo para conocer todas sus curiosidades!
Una de las razones por la que es tan importante, es que es el centro de la vida social de la ciudad y posee un ambiente exquisito. Asimismo, otro motivo, es que reúne una serie de fuentes, esculturas y edificios de gran valor, especialmente artístico.
Este lugar esconde una gran historia detrás, con anécdotas y secretos que en este artículo voy a desvelarte. Si te apasiona el arte, la historia o simplemente Roma, este artículo sobre la Plaza Navona está hecho para tu disfrute. Así que… ¡Vamos allá!
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Índice del artículo
La Plaza Navona es de estilo barroco, y es, sin lugar a dudas, uno de los rincones que ver en Roma más fascinantes y llenos de secretos. Ésta, mantiene la forma alargada que le daba el estadio de Domiciano, el cual ocupaba el mismo espacio en época romana.
Su principal atracción es la Fontana de los Cuatro Ríos de Bernini, su fuente más importante y que se encuentra en el centro. La cual está acompañada de dos fuentes menores, que se encuentran en ambos extremos de la plaza. Y de las que ahora te desvelaré sus secretos.
Asimismo, justo frente a la fuente central se encuentra la iglesia de Sant’Agnese in Agone, que significa Santa Inés en Agonía. Y que recibe el nombre de esta mártir cristiana que fue torturada en el estadio de Domiciano.
Como ya he comentado anteriormente, la Piazza Navona posee mucho ambiente, lo que se refleja en la gran cantidad de cafeterías y restaurantes que se encuentran en su lado este. Y es normal, ver cada día muchos artistas pintando cuadros y músicos tocando en en el lugar.
La verdad es que es un sitio muy romántico, y que bien merece una visita o diez, ya que se llega con facilidad desde muchos lugares. Ya verás que pasas por ella muchas veces durante tus días de vacaciones. Es una de las plazas de Roma más icónicas.
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Termina en la Piazza Navona, y pasa por la Plaza de España, la Fontana de Trevi y el Panteón de Agripa, entre más lugares. Es una buena opción para empezar tu visita a la Ciudad Eterna.
La historia de la Piazza Navona nos muestra, que ésta se sitúa sobre el que antes era el Stadium de Domiciano, que fue construido en el año 85 en el Campo de Marte, después del gran incendio del año 80. Medía 276 metros de largo por 106 de ancho y poseía una capacidad de 20.000 espectadores.
En este estadio, construido por orden del emperador que le daba nombre, los romanos iban a ver lo que ellos llamaban agones, juegos en honor al dios Júpiter, que eran competiciones atléticas en la Antigua Roma.
El estadio que antes ocupaba la plaza, se construyó a semejanza de los estadios griegos, parecidos a los circos romanos, pero más pequeños. Su exterior estaba confeccionado como el Coliseo o el Teatro Marcelo: con dos pisos formados con arcos de medio punto.
Más tarde, conforme pasaron los años, el lugar fue adquiriendo distintos aspectos, como el de un mercado en la Edad Media, cuando fueron construyendo casas y palacios sobre sus ruinas. Éste mercado todavía existe, pero se trasladó al Campo dei Fiori.
Su aspecto barroco actual es gracias al Papa Inocencio X, quien tenía un palacio en la zona, y quiso convertir la plaza en el lugar más espectacular de la ciudad, con éxito. Allí se construyeron las fuentes y la Iglesia de Santa Inés en Agonía, además del Palazzo Pamphili.
Un dato curioso es que, antiguamente, en el mes de agosto, la plaza se inundaba completamente con agua de las fuentes para combatir el calor, convirtiéndose en El lago de la Piazza Navona.
Por otra parte, aquí se celebró una misa el día de Pascua de Jubileo en el año 1650, lo que logró atraer a miles de personas y convertir la plaza en un símbolo en Roma. Lo que le dio fama y popularidad.
Asimismo, se cree que su nombre proviene de los juegos, agones, palabra que evolucionó a nagone, a continuación a navone y por último a navona. ¡Casi nada! ¡Fíjate si tiene historia la Plaza Navona!
De otro lado, comentarte que si te interesan las plazas y fuentes de la Ciudad Eterna, que no son pocas, te recomiendo este paseo por las plazas y fuentes de Roma que hicieron mis padres y les encantó. Roma es la ciudad con más plazas e iglesias posiblemente del mundo.
Las fuentes de la Plaza Navona, son lo que realmente hoy en día le dan su grandiosa fama. Sobre todo porque fueron realizadas por dos grandes artistas, como Bernini, el más grande de los dos y Giacomo della Porta.
Como te he comentado anteriormente, la plaza destaca por sus tres fuentes. Una central, la más grande y espectacular, llamada la Fontana de los Cuatro Ríos, y dos menores, también bellas, una en cada extremo de la plaza: la Fuente del Moro y la Fuente de Neptuno.
Fontana de los Cuatro Ríos
La Fontana dei Quattro Fiumi fue construida por Bernini entre los años 1648 y 1651 por encargo del Papa Inocencio X. Y es una de las fuentes más bonitas no solamente de Roma, sino también del mundo.
En ella hay cuatro esculturas, las cuales representan a los ríos más conocidos en ese momento: el Nilo (en África), el Ganges (Asia), el Danubio (en Europa) y el Río de la Plata (en América). Todas ellas tienen una gran expresividad, propia del barroco.
Junto a estas esculturas hay también representaciones de los animales más significativos de los distintos continentes: el caballo, el león, el caimán y la serpiente. Cuando los observes, quedarás enamorado de la Fontana de los Cuatro Ríos. Pero hay más.
Ya que en el centro se sitúa el Obelisco de Domiciano, un obelisco egipcio construido y traído a Roma por orden de este emperador. En lo alto de éste aparece una nueva figura de un animal: una paloma que porta una ramita de olivo.
La obra de Bernini, maestro del barroco y arquitecto también de la Plaza de San Pedro entre muchas otras grandes obras, en la Piazza Navona, es espectacular y digna de admiración.
Fontana del Moro
La Fontana del Moro se sitúa en la parte sur de la plaza. Fue creada por Giacomo della Porta en 1575, y representa a un moro de pie, sobre una concha marina, el cual está luchando contra un delfín rodeado por cuatro tritones.
En un principio era conocida como Fuente del Caracol, sin embargo, en 1653 Bernini le añadió los delfines, que no estaban anteriormente.
Fontana del Nettuno
La Fontana del Nettuno fue creada también por Giacomo della Porta en el año 1574, sin embargo, hasta 1878 no se le añadió la escultura de Neptuno. Ésta se encuentra en el extremo norte de la plaza.
La fuente se compone de una estatua central del dios Neptuno, el cual se encuentra atacando a leones marinos y rodeado por cuatro nereidas. Asimismo, podemos encontrar más estatuas de caballos huyendo, que fueron colocadas siglos más tarde de su creación.
Qué ver también en la plaza
Estas son las cosas que ver en la Plaza Navona también:
Iglesia de Santa Inés en Agonía: En la plaza también se encuentra la Iglesia de Sant’Agnese in Agone, una iglesia barroca, construida principalmente por los arquitectos Girolamo Rainaldi, Carlo Rainaldi y Francesco Borromini. Quién sustituyó a los anteriores.
Su construcción se inició en el año 1652, por orden del papa Inocencio X, ya que allí se encontraba un palacio familiar, el Palazzo Pamphili, del que ahora hablaremos, y ésta sería su capilla anexa.
En su interior encontrarás maravillosas obras de arte, tales como los magníficos frescos de la cúpula y las pechinas, los relieves de los cuatro altares, o la Tumba Monumento del Papa Inocencio X.
Restos del estadio de Domiciano: En Santa Inés también se encuentran los restos del estadio de Domiciano, los cuales son Patrimonio de la Humanidad. Están a 5 metros bajo tierra, y es todo lo que queda del antiguo estadio del que ya hemos hablado anteriormente.
Desde hace algún tiempo, es posible también visitarlos, así que, si tienes la oportunidad, no dudes en hacerlo. Quedarás maravillado.
Palacio Pamphili: El Palazzo Pamphili data del S.XVII y fue construido por Girolamo Rainaldi y Carlo Rainaldi al más puro estilo barroco a partir de 1644. Su construcción duraría unos 6 años. Como hemos visto anteriormente. Podemos verlo en la plaza al lado de Santa Inés.
Su interior posee 3 patios y 23 estancias decoradas exquisitamente con frescos de autores como Andrea Camassei, Giacinto Gemignani, Gaspard Dughet y Giacinto Brandi, entre muchos otros. Su fachada te llamará la atención por su gran nobleza.
Iglesia de Nostra Signora del Sacro Cuore: En la Piazza Navona también se encuentra otra iglesia, la Iglesia de Nostra Signora del Sacro Cuore. Construida por orden Enrique de Castilla, hijo del rey de Castilla y León Fernando III.
La construyeron bajo la advocación de Santiago, patrón de la Reconquista de Castilla, por lo que inicialmente se denominó Iglesia de Santiago de los Españoles.
Más tarde, los españoles la abandonaron, y la iglesia fue confiada a la Congregación de los Misioneros del Sagrado Corazón de Jesús, por ello su nombre de Nuestra Signora del Sacro Cuore.
Palacio de Cupis: Este encantador palacio fue edificado entre los siglos XV y XVI y no muchas personas lo conocen. Éste se encuentra en la parte noroeste de la Piazza Navona y era propiedad de Bernardino de Cupis.
Ya más adelante, en el siglo XVIII el palacio de Cupis fue ocupado por el governador que se encargaba de administrar el mercado que había en el lugar.
Palacio Torres Massimo Lancellotti: El Palazzo De Torres-Lancellotti o Palazzo Massimo-Lancellotti, se encuentra en el sur de la plaza. Y posee más fachadas que se encuentran en la Via della Posta Vecchia, la Via della Cuccagna, la Piazza de ‘Massimo y Vicolo della Cuccagna.
Este palacio, que se encuentra junto al Palazzo Braschi, del que ahora hablaremos, era de los De Torres. Una familia célebre por poseer una valiosa colección de cartas náuticas antiguas. De hecho, uno de sus familiares, era intérprete del mismísimo Cristóbal Colón.
Palacio Braschi: Este otro palacio de estilo neoclásico, es famoso por albergar ahora el Museo di Roma. Que posee una colección que explica la historia de la ciudad de Roma desde la Edad Media hasta bien entrado el siglo XIX.
Este valioso e histórico edificio, fue realizado bajo mandato del duque Luigi Braschi Onesti, sobrino del Papa Pío VI. En el siglo XVI, se encontraba otro palacio en el lugar en el que este se encuentra. Si tienes tiempo y te apetece, te recomiendo que lo visites ya que es interesante.
De todos los lugares y cosas que ver en la Plaza Navona, aparte de sus fuentes, te recomendaría sobre todo que visitaras sin lugar a dudas la Iglesia de Santa Inés en Agonía y los restos del Estadio de Domiciano.
Comer en la plaza: recomendaciones
Comer en la Plaza Navona puede resultar tentador, ya que encontrarás una gran cantidad de restaurantes en los que hacerlo. Sin embargo, yo no lo recomiendo. Sobre todo si tu presupuesto no es desorbitado.
Hay que ir con mucho cuidado, pues los precios suelen estar bastante elevados por esa zona. Y te lo digo por experiencia de uno de mis familiares y su pareja. Los cuales, pagaron de un plato de calamares, un refresco y una copa de vino 60 euros. Sí, como lo lees. De ti depende.
Aun así no te preocupes, ya que por las calles colindantes, seguramente encuentres precios más razonables y que valgan la pena. Yo lo he hecho, y he comido la mar de bien justo a dos minutos de la plaza. Solo hay que buscar un poco.
Si te preguntas como llegar a la Piazza Navona usando el transporte, tienes que saber que podrás utilizar el Metro de Roma de la línea A, teniendo como parada más cercana Spagna.
Esta estación está al lado de Plaza España, lugar que te recomiendo que visites también. Desde allí, baja caminado por la espectacular Via dei Condotti hasta llegar a tu destino.
De otro lado, también tienes la opción de coger las líneas de autobús 492, 70, 64 y 40, entre otras. Te dejo un mapa aquí abajo por si quieres utilizarlo y guiarte. Yo te recomendaría en la medida de lo posible que vayas caminando.
Asimismo, al ser una plaza céntrica en la ciudad, podrás encontrarte con algunos monumentos cercanos como el Panteón de Agripa, el Palacio Altemps, el Campo de Fiori, que es otra plaza; el Área Sacra, e incluso, el Castillo de Sant’Angelo.
Y hasta aquí ha sido todo en sobre este artículo de la plaza barroca más bonita de Roma: La Piazza Navona. Si deseas comentarme cualquier cosas o incluso ayudarme a ampliar este artículo, no dudes en dejarme más abajo tu comentario. ¡Un saludo!